Defendiendo la sana doctrinaPara un mundo perdido en delitos y pecados, una iglesia santa, marcada por la sangre redentora del señor Jesucristo, ven te invitamos para que te unas a la gloriosa familia de Cristo.
Defendiendo la sana doctrinaPara un mundo perdido en delitos y pecados, una iglesia santa, marcada por la sangre redentora del señor Jesucristo, ven te invitamos para que te unas a la gloriosa familia de Cristo.